THE LATIN VOX (26 de octubre del 2024).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz
En un revelador informe del New York Times, se ha descubierto que hackers vinculados al gobierno chino habrían dirigido su atención hacia los teléfonos utilizados por el expresidente Donald Trump y su compañero de fórmula, JD Vance. Esta intrusión forma parte de un ataque más amplio a las redes de telecomunicaciones de Estados Unidos, que ha encendido las alarmas sobre la seguridad de datos sensibles en el país.
Fuentes cercanas a la campaña de Trump han confirmado que los números de teléfono de ambos candidatos republicanos fueron objeto de este hackeo, el cual se llevó a cabo a través de la red de Verizon. La campaña fue informada de esta brecha en la seguridad en días recientes, lo que ha llevado a la administración de Trump a lanzar acusaciones en dirección a la Casa Blanca de Biden y a la vicepresidenta Kamala Harris.
El hackeo, descrito como «sofisticado» por los investigadores, ha puesto en tela de juicio no solo la seguridad de los candidatos, sino también la de otros funcionarios actuales y pasados que también fueron blanco de estos ataques. La magnitud del acceso a datos sensibles sigue siendo objeto de investigación, y las autoridades trabajan arduamente para determinar qué información, si es que alguna, fue comprometida.
La situación subraya la creciente preocupación sobre la ciberseguridad en Estados Unidos, especialmente en un momento en que las tensiones entre las potencias mundiales están en aumento. La campaña de Trump, al responsabilizar a la administración demócrata, agrega una capa política a lo que ya es un asunto de seguridad nacional.
Este incidente no solo resalta los riesgos a los que están expuestos los líderes políticos, sino también la vulnerabilidad de las infraestructuras de telecomunicaciones en un entorno cada vez más digitalizado. A medida que se desarrollan más detalles sobre el ataque, la atención se centrará en las implicaciones que esto podría tener en el próximo ciclo electoral y en la política exterior de Estados Unidos frente a China.
La comunidad internacional observa con interés cómo se desarrollará esta situación, ya que el hackeo pone de relieve la necesidad de fortalecer las medidas de ciberseguridad y de establecer protocolos más robustos para proteger a quienes están en el ojo público.
Crédito fotográfico: Adam Gray/AFP/Getty Images