THE LATIN VOX (26 de noviembre del 2024).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz
El premier de Quebec, François Legault, ha pedido al primer ministro canadiense Justin Trudeau que actúe de forma contundente ante la amenaza del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, de imponer aranceles de hasta un 25% a los productos importados de Canadá y México.
Legault, preocupado por los efectos devastadores de estos aranceles en la economía quebequense, también considera que las preocupaciones de Trump sobre la seguridad en las fronteras son válidas y deben ser abordadas de manera urgente para evitar una guerra comercial.
Durante una conferencia de prensa celebrada el martes por la tarde en Quebec, Legault subrayó que los aranceles del 10% anunciados por Trump durante su campaña electoral o el 25% planteado recientemente tendrían un impacto desastroso en la economía de la provincia, que depende en gran medida de las exportaciones a los Estados Unidos. «Un arancel del 25% significaría la pérdida de decenas de miles de empleos en Quebec y en Canadá, por lo que debemos tomarlo muy, muy en serio», afirmó el premier.
La seguridad fronteriza como prioridad
Legault ha sido claro en cuanto a la necesidad de reforzar la seguridad en las fronteras canadienses, especialmente en la comunidad Kanien’kehá:ka de Akwesasne, que se encuentra en la frontera entre Quebec, Ontario y Nueva York.
El premier también ha sugerido que Trudeau debería negociar con los Estados Unidos para identificar sectores clave, como la electricidad y el aluminio, de los cuales el país vecino no puede prescindir. «Tenemos que usar estos sectores como herramientas de negociación», indicó Legault, al tiempo que instaba a una respuesta estratégica para evitar represalias económicas.
Las exportaciones de Quebec a los Estados Unidos alcanzan los 87 mil millones de dólares, mientras que las importaciones desde el país vecino ascienden a 43 mil millones, lo que refleja la importancia crítica de este vínculo comercial para la provincia. En este sentido, Legault hizo un llamado a Trudeau para que la provincia de Quebec esté representada en todas las negociaciones futuras relacionadas con el comercio entre ambos países.
El impacto económico y las reacciones de la industria
Los sectores más afectados por la amenaza de aranceles son la industria aeronáutica, el aluminio, los productos forestales y los combustibles minerales. Casi el 70% de las exportaciones de Quebec tienen como destino los Estados Unidos, y la amenaza de aranceles podría afectar gravemente estos mercados clave.
Benjamin Bélair, representante de Quebec en Washington D.C., expresó que, aunque ya se anticipaba la incertidumbre que un mandato de Trump podría traer, un arancel del 25% sería perjudicial tanto para los consumidores canadienses como estadounidenses. «El 90% del aluminio que exportamos va a los EE.UU. y un arancel elevaría los precios», explicó Bélair.
Jean-François Samray, presidente del Consejo de la Industria Forestal de Quebec, destacó que el 50% de los productos forestales de la provincia se exportan a Estados Unidos. Sin embargo, el sector ya enfrenta disputas comerciales con el país vecino por el arancel al softwood lumber (madera blanda), lo que ha complicado aún más las relaciones comerciales en este ámbito.
«Los consumidores estadounidenses serían los primeros en sufrir los efectos de estos aranceles», señaló Samray, recordando que el país no es autosuficiente en cuanto a productos de madera.
Por su parte, Julie White, portavoz de Manufacturiers et Exportateurs du Québec, advirtió que el 75% de los bienes manufacturados en Quebec se destinan al mercado estadounidense. En este contexto, la implementación de un arancel del 25% provocaría una pérdida significativa de empleos en las fábricas de ambos lados de la frontera. «Debemos ser realistas sobre el efecto de estas medidas en la economía, y debemos tomar en serio lo que Trump está diciendo. Tiene el poder de implementar estas medidas», añadió White.
Un futuro incierto para la economía quebequense
El gobierno de Quebec ya se está preparando para enfrentar el impacto de una posible guerra comercial, aunque algunos analistas advierten que las consecuencias podrían ser catastróficas si Trump lleva a cabo su amenaza. El hecho de que las principales industrias de la provincia dependen en gran medida del comercio con Estados Unidos plantea un escenario complicado para la política económica de Quebec.
Legault, consciente de la gravedad de la situación, reiteró que la prioridad debe ser evitar una guerra comercial mediante un enfoque diplomático y la mejora de la seguridad en la frontera. A pesar de las tensiones, el premier de Quebec sigue confiando en que Canadá puede convencer a Trump de que el país es un aliado confiable que puede contribuir a los objetivos de desarrollo económico de los EE.UU. sin causar daño a su propia economía.
En resumen, la amenaza de Trump ha puesto en alerta máxima a Quebec, cuyas economías regionales están profundamente integradas con el mercado estadounidense. La respuesta de Trudeau y las estrategias que implemente para fortalecer las relaciones bilaterales con EE.UU. serán cruciales para proteger los intereses económicos de Quebec y de Canadá en su conjunto. El diálogo y la negociación, en este sentido, se perfilan como las principales herramientas para evitar una crisis económica aún mayor.
Crédito fotográfico: Photo Le Canada Français – Archives