THE LATIN VOX (3 de diciembre del 2024).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz.
Este fin de semana, el presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, realizará su primer viaje internacional desde su victoria electoral, con un destino especial: París. Trump ha confirmado su asistencia a las ceremonias de reapertura de la icónica Catedral de Notre Dame, uno de los monumentos más emblemáticos de Francia, que se llevará a cabo este sábado tras más de cinco años de trabajos de restauración.
La catedral, que sufrió un devastador incendio en 2019 que casi la destruye por completo, reabrirá sus puertas tras una extensa rehabilitación. La ceremonia de reapertura será un evento de alta seguridad, con la presencia de aproximadamente 50 jefes de estado y de gobierno de todo el mundo, lo que subraya la importancia histórica de este momento para la cultura francesa y mundial.
A través de una publicación en su red social Truth Social, Trump expresó su honor por poder participar en este evento tan significativo: «Es un honor anunciar que viajaré a París el sábado para asistir a la reapertura de la magnífica e histórica Catedral de Notre Dame, que ha sido completamente restaurada después de un devastador incendio hace cinco años. El presidente Emmanuel Macron ha hecho un trabajo maravilloso asegurando que Notre Dame vuelva a su nivel de gloria, ¡y aún más! Será un día muy especial para todos», escribió Trump en su mensaje.
La reconstrucción de Notre Dame fue un proceso monumental que involucró a expertos de todo el mundo, y se convirtió en un símbolo de la resiliencia francesa tras el desastre. Durante el incendio de 2019, las llamas destruyeron el techo y colapsaron la aguja de la catedral, amenazando con destruir una de las mayores maravillas arquitectónicas del mundo, famosa por sus vitrales y su histórica estructura gótica. En ese momento, Trump, que era presidente de los Estados Unidos, sugirió a las autoridades francesas el uso de aviones cisterna para apagar el fuego, aunque las autoridades rápidamente aclararon que el uso de agua a gran escala podría haber causado el colapso de la estructura.
La relación entre Trump y el presidente francés Emmanuel Macron ha sido compleja. En los primeros años de su presidencia, ambos líderes intentaron estrechar lazos, con Macron siendo el invitado de honor en la primera cena de estado de Trump. Sin embargo, la relación se enfrió a medida que Trump cuestionaba la necesidad de la OTAN y ponía en duda el compromiso de Estados Unidos con el pacto de defensa mutua, lo que generó fricciones con otros líderes europeos, incluidos Macron.
El evento de reapertura de Notre Dame será una celebración de varios días, comenzando con una misa inaugural presidida por el arzobispo de París, Laurent Ulrich, quien abrirá las puertas de la catedral con su báculo, marcando el regreso de la iglesia a la vida pública. Posteriormente, los asistentes podrán disfrutar de un concierto de alto nivel con la participación de artistas de renombre internacional, como la soprano Pretty Yende, el pianista Lang Lang, y el cellista Yo-Yo Ma, entre otros.
El domingo, el arzobispo Ulrich presidirá una misa de consagración y la bendición del nuevo altar. La Île de la Cité, donde se encuentra la catedral en medio del río Sena, será cerrada al público durante los eventos, y se ha dispuesto un área para que 40,000 personas puedan ver las ceremonias desde la ribera sur del río.
Con esta visita, Trump no solo marcará su regreso a la arena internacional tras su victoria electoral, sino que también reafirmará su apoyo a Francia y su cultura, en un momento en que la restauración de Notre Dame se presenta como un testimonio del poder de la solidaridad y la determinación humana. Para los parisinos y el mundo entero, la reapertura de Notre Dame es mucho más que una simple inauguración: es un acto de resurgimiento y esperanza tras la tragedia, un símbolo de la resiliencia frente a la adversidad.
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