Ontario ha informado un alarmante aumento en los casos de sarampión, con 37 de ellos directamente relacionados con una exposición reciente en la provincia vecina de New Brunswick. La situación ha generado preocupación entre las autoridades sanitarias, quienes han intensificado las medidas de prevención y seguimiento para evitar una propagación mayor de la enfermedad.
Según el Ministerio de Salud de Ontario, los casos de sarampión se han disparado en las últimas semanas, lo que ha llevado a un reforzamiento de las campañas de vacunación en toda la provincia. La mayoría de los casos se habrían originado después de una exposición en New Brunswick, donde un brote de sarampión afectó a varias personas que luego viajaron a Ontario.
Este vínculo entre las provincias ha complicado los esfuerzos para contener la enfermedad, ya que se han registrado casos tanto en personas no vacunadas como en aquellas con un historial de vacunación incompleto.
El sarampión es una enfermedad altamente contagiosa, que puede tener consecuencias graves, especialmente para los niños pequeños, las personas inmunodeprimidas y las mujeres embarazadas.
A pesar de que las tasas de vacunación en Canadá son generalmente altas, las autoridades han señalado que una disminución en las tasas de inmunización en algunas áreas podría ser un factor clave en la reaparición de brotes como este.
Los expertos instan a la población a que se asegure de estar al día con sus vacunas, ya que la mejor forma de prevenir el sarampión sigue siendo la vacunación con la combinación de la vacuna triple viral (sarampión, paperas y rubéola). Además, el gobierno de Ontario ha lanzado alertas y ha intensificado las inspecciones en lugares públicos y escuelas, lugares donde el virus podría propagarse rápidamente.
A medida que se intensifican los esfuerzos para controlar el brote, las autoridades sanitarias también están colaborando con las de New Brunswick para realizar un seguimiento de los posibles contactos de las personas infectadas y así contener cualquier expansión adicional del sarampión.
Este brote subraya la importancia de mantener altos niveles de vacunación en toda la población y el riesgo que conlleva la propagación de enfermedades prevenibles cuando las tasas de inmunización caen por debajo de los umbrales necesarios. Las autoridades instan a los residentes a que tomen medidas preventivas, sigan las recomendaciones de salud pública y se vacunen para evitar una mayor crisis sanitaria.