THE LATIN VOX (12 de enero del 2025).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz
En medio de la creciente preocupación por la desinformación en las redes sociales, el presidente saliente de Estados Unidos, Joe Biden, no dudó en expresar su descontento con la decisión de Meta de eliminar sus equipos de verificación de hechos en favor de los «community notes», una alternativa moderada por los mismos usuarios. Biden calificó esta medida de «realmente vergonzosa» y afirmó que va en contra de los principios fundamentales de la justicia estadounidense.
“La idea de abandonar la verificación de hechos y no reportar nada relacionado con la discriminación… lo encuentro contrario a la justicia estadounidense”, señaló Biden durante una rueda de prensa. “Decir la verdad importa”, agregó, subrayando su firme postura frente a las consecuencias de la propagación de información errónea.
La polémica se desató luego de que Mark Zuckerberg, CEO de Meta, anunciara la decisión de suspender los equipos de verificación de hechos de Facebook, Instagram y Threads, que habían sido implementados en 2016 tras las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
Zuckerberg justificó el cambio asegurando que la verificación de hechos había terminado siendo más perjudicial que beneficiosa para la confianza pública, y que el enfoque se centraría nuevamente en priorizar la libertad de expresión. “Vamos a volver a nuestras raíces, simplificar nuestras políticas y restaurar la libre expresión en nuestras plataformas”, declaró Zuckerberg.
Este giro en la estrategia de Meta llega en un momento de alto voltaje político, con las elecciones presidenciales de 2024 a la vuelta de la esquina. El desencuentro entre Biden y Zuckerberg también refleja un contexto más amplio en el que las redes sociales se han convertido en el centro del debate sobre la desinformación y la manipulación de la opinión pública.
En particular, Biden ha sido un defensor constante de un enfoque más estricto para combatir las noticias falsas, algo que, según él, lamentablemente no se logró con éxito durante su mandato.
Zuckerberg, por su parte, no se quedó callado. En una reciente entrevista en el programa The Joe Rogan Experience, el CEO de Meta aseguró que miembros de la administración de Biden habían presionado a Facebook para eliminar contenido relacionado con la COVID-19, incluyendo humor y sátira.
Según Zuckerberg, las llamadas fueron intensas y agresivas, describiendo cómo los funcionarios del gobierno “gritaban” y “maldecían” a su equipo. A pesar de esto, Zuckerberg defendió su postura de no eliminar contenido veraz, señalando que algunas de las decisiones tomadas en el pasado podrían haberse revisado con el beneficio de la retrospectiva.
Este enfrentamiento entre el presidente y el magnate de la tecnología también resalta un tema crucial: el control de la información en las plataformas digitales. Con la llegada de Elon Musk a la presidencia de X , la moderación de contenidos en las redes sociales se ha convertido en un campo de batalla ideológico, en el que las decisiones empresariales de gigantes tecnológicos tienen un impacto directo en la esfera política.
La eliminación de la verificación de hechos en Meta, al igual que en X, pone en evidencia las tensiones sobre el equilibrio entre la libertad de expresión y la responsabilidad en la lucha contra la desinformación.
La postura de Biden sobre el asunto se hace aún más relevante dado el impacto que las plataformas sociales tienen en las elecciones. En una entrevista con USA Today, el presidente mencionó que uno de los mayores arrepentimientos de su presidencia había sido la falta de una respuesta más eficaz contra la desinformación, un tema particularmente relevante durante el mandato de su predecesor, Donald Trump.
“Lo que está haciendo Zuckerberg es completamente contrario a lo que representa Estados Unidos”, afirmó Biden, quien subrayó que la decisión de Meta de delegar la verificación de hechos a los propios usuarios es irresponsable. “La idea de que un multimillonario pueda comprar algo y decir que no lo va a verificar, mientras millones de personas leen esa información, creo que es realmente vergonzosa”, concluyó.
Con las elecciones de 2024 en el horizonte, el debate sobre cómo manejar la información en las redes sociales se intensificará. A medida que la desinformación continúa siendo una amenaza palpable para la integridad de las democracias, la presión sobre las empresas tecnológicas para que asuman responsabilidades por el contenido que albergan solo se incrementará.
Crédito fotográfico: Getty Images