La comunidad de defensores de la reducción de daños en Canadá está pidiendo a la Corte Suprema del país que emita una decisión que clarifique el alcance y las protecciones ofrecidas por la Ley del Buen Samaritano. Esta legislación, diseñada para proteger a quienes solicitan ayuda de emergencia durante una sobredosis, ha sido criticada por su aplicación inconsistente y su impacto limitado en el comportamiento de las personas frente a crisis relacionadas con las drogas.
La Ley del Buen Samaritano sobre Sobredosis, aprobada en 2017, garantiza que aquellos que llamen al 911 en casos de sobredosis no enfrenten cargos legales relacionados con la posesión simple de drogas. Sin embargo, activistas y expertos legales señalan que la falta de conocimiento público sobre la ley, combinada con la persistente desconfianza hacia las fuerzas del orden, ha limitado su efectividad. A menudo, las personas en situación de riesgo temen represalias legales, especialmente cuando existen factores adicionales como órdenes de arresto pendientes u otros delitos asociados.
Los defensores argumentan que una aclaración por parte de la Corte Suprema podría reforzar la confianza en la ley y aumentar su impacto en la reducción de muertes por sobredosis. Además, destacan la necesidad de campañas educativas más amplias para garantizar que las comunidades vulnerables comprendan sus derechos y se sientan seguras al buscar ayuda. Mientras tanto, los datos continúan mostrando que las sobredosis son una crisis nacional en Canadá, con miles de muertes cada año. En este contexto, el fallo de la Corte podría marcar un antes y un después en los esfuerzos por salvar vidas.