
Investigadores del Instituto de Ciencia y Tecnología Avanzadas de Corea (KAIST) han desarrollado una nueva «tinta electrónica» que combina metal de galio con polímeros, capaz de cambiar de estado desde rígido a flexible al aplicarle calor suave, abriendo paso a una generación de dispositivos portátiles y tecnologías biomédicas flexibles .
Tecnología central
- La tinta consiste en nanopartículas de galio (un metal sólido a temperatura ambiente que funde cerca de los 37 °C) mezcladas en una matriz polimérica disuelta en dimetilsulfóxido (DMSO).
- Al calentarse, el DMSO genera un entorno ligeramente ácido que disuelve la capa de óxido superficial del galio, permitiendo que las partículas se fundan y formen trazas conductoras .
- Este proceso permite obtener circuitos muy finos (hasta 50 µm, más delgados que un cabello humano) y materiales cuya dureza varía drásticamente: más de 1.400 veces más suaves al calentarse .
Aplicaciones demostradas
El equipo surcoreano probó dos aplicaciones prácticas:
- Dispositivo de salud vestible: rígido fuera del cuerpo para fácil manipulación, se ablanda al contacto con la piel para una mayor comodidad .
- Implante cerebral flexible: permanece duro para su inserción precisa, luego se ablanda dentro del cerebro para reducir irritaciones .
Estos avances prometen impulsar electrónica variable en rigidez, útil en medicina, robótica y wearables avanzados .
Ventajas y escalabilidad
- La tinta puede aplicarse mediante impresión tradicional (tipo serigrafía o recubrimiento por inmersión), lo que favorece su fabricación a gran escala .
- Combina la precisión estructural de los circuitos rígidos con la comodidad y adaptabilidad de los sistemas flexibles.