
THE LATIN VOX (26 de julio del 2025).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, confirmó que se reunirá este domingo en Escocia con el presidente estadounidense Donald Trump, en lo que podría marcar el cierre de un esperado acuerdo comercial transatlántico entre la Unión Europea y Estados Unidos.
El anuncio ha generado un torbellino diplomático y comercial, con líderes europeos y analistas señalando que un pacto podría estar a solo días —o incluso horas— de concretarse.
Un encuentro cargado de simbolismo
Trump aterrizó en Escocia el viernes por la tarde, iniciando una visita de cuatro días que combina diplomacia, negocios y su conocida afición por el golf. Allí, en Aberdeenshire, inaugurará su nuevo campo de golf, pero también mantendrá reuniones clave con figuras políticas, incluyendo al primer ministro británico, Keir Starmer, y al primer ministro escocés, John Swinney.
“Estoy deseando reunirme con el líder escocés, es un buen hombre”, dijo Trump antes de abordar el Air Force One. “Tengo mucho amor por Escocia. Mi madre nació aquí”.
A pesar del tono conciliador, Trump lanzó dardos en varias direcciones, criticando los parques eólicos (“están arruinando vuestros hermosos campos y matando a las aves”) y calificando la inmigración en Europa como una “invasión que está matando al continente”.
El contexto del acuerdo
La reunión con Von der Leyen no se habría concretado si no hubiese un acuerdo casi listo para firmar, según fuentes cercanas a ambas delegaciones. Se espera que las negociaciones giren en torno a aranceles base del 15% en sectores clave como el automotriz.
Este umbral, aunque más bajo que los actuales, aún dejaría en desventaja a marcas europeas como Volkswagen frente a vehículos británicos como Range Rover, que ya gozan de un trato preferencial negociado previamente por el Reino Unido.
Trump ya alcanzó un acuerdo con el Reino Unido en mayo, reduciendo los aranceles sobre automóviles del 27,5% al 10%, a cambio de mayores importaciones británicas de carne de res y etanol estadounidense. Aunque el pacto fue recibido con entusiasmo en Downing Street, sectores agrícolas británicos han alzado la voz en señal de alarma.
“El mayor temor es que Starmer venda al campo británico permitiendo el ingreso de productos lácteos de EE.UU., que utilizan hormonas prohibidas en Europa desde hace 30 años”, advirtió Tom Bradshaw, presidente de la Unión Nacional de Agricultores.
Trump y Europa: De la tensión al pragmatismo
Durante su mandato anterior, Trump amenazó con aranceles a más de 60 países, generando tensiones profundas con aliados históricos. Pero en su regreso al poder, parece decidido a cerrar acuerdos antes de su autodeclarado plazo límite: el próximo viernes.
“Con Japón teníamos un 25% de posibilidades de cerrar un acuerdo, y lo logramos porque ellos volvieron con mejores ofertas”, dijo Trump. “Con Europa estamos en un 50/50… si lo logramos, será el acuerdo más grande de todos”.
Volkswagen reveló esta semana que los aranceles impuestos por Trump han supuesto una pérdida de 1.000 millones de libras en el primer semestre del año, lo que suma presión a Bruselas para asegurar una resolución rápida.
Von der Leyen: ¿Peón o estratega?
El viaje de Von der Leyen a Escocia, realizado a invitación directa de Trump, ha sorprendido a muchos en el seno de la UE. En declaraciones breves, la líder europea dijo haber tenido una “buena conversación” telefónica con el presidente estadounidense, y que el encuentro en Escocia será clave para “mantener sólidas las relaciones comerciales transatlánticas”.
El primer ministro irlandés, Micheál Martin, expresó un cauto optimismo: “Esperamos que el acuerdo pueda firmarse antes de que termine el fin de semana”.
¿El fin de la guerra comercial?
Si se firma, el acuerdo entre la UE y EE.UU. podría marcar el fin de una etapa de guerra arancelaria que se intensificó durante el primer mandato de Trump. También podría establecer una nueva era de cooperación económica, aunque no exenta de tensiones internas: los agricultores, los ecologistas y los fabricantes de automóviles observan con cautela cada cláusula.
Por ahora, el mundo observa cómo una partida de golf en Escocia podría esconder el telón de fondo de uno de los acuerdos económicos más importantes de la década.
Crédito fotográfico: Euronews