
THE LATIN VOX (9 de agosto del 2025).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció que se reunirá con el mandatario ruso, Vladímir Putin, el próximo viernes en Alaska para discutir el conflicto en Ucrania, que ya supera los tres años y medio de duración.
La cumbre, confirmada también por el Kremlin, podría marcar el primer encuentro bilateral entre Washington y Moscú desde 2021.
Trump adelantó que un eventual acuerdo de paz implicaría “un intercambio de territorios para beneficio de ambos países”, sin dar más detalles. Sin embargo, medios como Bloomberg señalan que el plan podría consolidar parte de las ganancias territoriales de Rusia, congelando las líneas de frente en regiones como Jersón y Zaporiyia.
Un posible alto el fuego
La propuesta, según fuentes estadounidenses y rusas, incluiría el compromiso de Moscú de detener su ofensiva a cambio de concesiones territoriales, una fórmula que podría resultar políticamente explosiva para Kiev. El primer ministro polaco, Donald Tusk, afirmó tras conversar con el presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, que “un congelamiento del conflicto” podría estar cerca.
Zelensky, de acuerdo con Tusk, se mostró “cauto pero optimista” ante la posibilidad de un cese de hostilidades y ha mantenido contactos con líderes europeos como el canciller alemán, Friedrich Merz, y el presidente francés, Emmanuel Macron, en un intento de asegurar que Ucrania participe en cualquier negociación de paz.
Exclusión de Kiev en la agenda inicial
La Casa Blanca había explorado la posibilidad de una reunión trilateral entre Trump, Putin y Zelensky, pero el Kremlin rechazó la idea. “Nos estamos enfocando en preparar primero un encuentro bilateral con Trump”, declaró Yuri Ushakov, asesor de Putin. El líder ruso aseguró que no descarta reunirse con Zelensky “en general”, aunque consideró que “aún no existen las condiciones” para ello.
Presión y tensiones previas
El encuentro se produce tras un ultimátum de Trump a Putin para acordar un alto el fuego antes de este viernes, bajo la amenaza de imponer sanciones secundarias. Paralelamente, Washington elevó un 25% los aranceles al petróleo ruso comprado por India, medida que Nueva Delhi calificó de “injusta y selectiva”.
Trump ha manifestado frustración por la prolongación del conflicto y las continuas ofensivas rusas contra ciudades ucranianas. “Putin… habla bien y luego bombardea a todos por la noche. Ahí hay un pequeño problema”, dijo el mes pasado.
Expectativa internacional
Si la cumbre de Alaska se concreta, no solo será un hito diplomático, sino también un momento decisivo para el futuro de la guerra en Ucrania y para las relaciones entre las dos potencias. La pregunta es si este encuentro abrirá la puerta a una paz negociada o, por el contrario, cimentará una división territorial que redefina el mapa de Europa oriental por décadas.
Crédito fotográfico: Table.Briefings