THE LATIN VOX (10 de agosto del 2025).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz.
Los líderes de Francia, Italia, Alemania, Polonia, Reino Unido, Finlandia y la presidenta de la Comisión Europea han lanzado un mensaje claro a pocos días de la esperada reunión entre Donald Trump y Vladimir Putin en Alaska: la paz en Ucrania no puede negociarse sin Ucrania y solo es posible en un contexto de alto el fuego o reducción de hostilidades.
En una declaración conjunta, los mandatarios subrayaron que cualquier resolución debe “proteger los intereses vitales de seguridad de Ucrania y de Europa”, incluyendo garantías sólidas y creíbles que permitan a Kiev defender su soberanía e integridad territorial. “Solo un enfoque que combine diplomacia activa, apoyo a Ucrania y presión sobre la Federación Rusa para poner fin a su guerra ilegal puede tener éxito”, afirmaron.
El vicepresidente de EE.UU., JD Vance, se reunió ayer sábado en Chevening House, al sureste de Londres, con el ministro británico de Exteriores, David Lammy, y representantes ucranianos y europeos para discutir el impulso de Trump hacia un acuerdo de paz.
Según The Wall Street Journal, los europeos presentaron una contrapropuesta que exigiría un alto el fuego previo y que cualquier intercambio territorial sea recíproco y respaldado por garantías de seguridad firmes. “No se puede iniciar un proceso cediendo territorio en medio de los combates”, declaró uno de los negociadores.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, rechazó tajantemente la idea de entregar tierras a cambio de paz, después de que Trump sugiriera la posibilidad de “intercambios de territorios”. “Ucrania no dará premios a Rusia por lo que ha hecho. Los ucranianos no entregarán su tierra al ocupante”, afirmó, aunque calificó la reunión de Chevening como constructiva: “Todos nuestros argumentos fueron escuchados. El camino hacia la paz debe determinarse junto y solo junto a Ucrania, ese es el principio clave”.
Desde París, Emmanuel Macron recalcó que “el futuro de Ucrania no puede decidirse sin los ucranianos, que llevan más de tres años luchando por su libertad y seguridad”. Añadió que Europa debe formar parte de la solución, pues “su propia seguridad está en juego”.
Mientras tanto, los combates no cesan. Dos personas murieron y 16 resultaron heridas el sábado cuando un dron ruso impactó contra un minibús en las afueras de Jersón. Otros dos fallecieron en la región de Zaporiyia tras el ataque de otro dron a su vehículo.
La Fuerza Aérea ucraniana informó de que interceptó 16 de los 47 drones lanzados por Rusia durante la noche, aunque 31 alcanzaron objetivos en 15 localidades. Moscú, por su parte, afirmó haber derribado 97 drones ucranianos sobre territorio ruso y el mar Negro, así como otros 21 la mañana del sábado.
La cita de Alaska, prevista para la próxima semana, se perfila como un momento crucial en el tablero geopolítico. Sin embargo, para Kiev y sus aliados europeos, cualquier negociación que ignore a Ucrania o comprometa su integridad territorial podría convertirse en una victoria diplomática para Moscú y un golpe a la seguridad continental.
Crédito fotográfico: UK Foreign Secretary/UPI/Shutterstock