THE LATIN VOX (25 de agosto del 2025).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz.
En un encuentro cargado de simbolismo histórico y ambición futura, el Primer Ministro de Canadá, Mark Carney, y su homólogo polaco, Donald Tusk, reafirmaron hoy en Varsovia la profunda amistad entre ambas naciones y anunciaron una renovada alianza estratégica que marcará una nueva era de cooperación bilateral.
La nueva asociación estratégica no solo consolida más de ocho décadas de relaciones diplomáticas, sino que se proyecta hacia el porvenir con un enfoque integral: fortalecer la seguridad colectiva, impulsar la transición energética, estimular la innovación tecnológica y apoyar firmemente a Ucrania frente a la agresión rusa.
Una historia compartida, un destino común
La relación entre Canadá y Polonia está tejida con los hilos de una historia común y un presente vibrante. La comunidad polaca-canadiense, que supera el millón de personas, encarna este puente humano que conecta ambas sociedades. “Nuestros pueblos están unidos por valores comunes: la democracia, la soberanía nacional y los derechos humanos”, declaró Carney durante la conferencia de prensa conjunta.
Ambos países reafirmaron su compromiso con un orden internacional basado en reglas, una arquitectura de seguridad transatlántica robusta y un sistema de comercio global justo y abierto.
Energía, defensa y tecnología: los pilares de una economía del futuro
Uno de los ejes centrales del nuevo acuerdo es el fortalecimiento del vínculo económico, con énfasis en sectores estratégicos como energía limpia, defensa y aviación.
En materia energética, se anunció el lanzamiento de un diálogo bilateral entre los ministerios de energía, que incluirá temas clave como hidrógeno bajo en carbono, minerales críticos, energía eólica marina y cooperación nuclear. Polonia enviará una misión comercial nuclear a Canadá en noviembre, con el objetivo de explorar oportunidades en tecnologías emergentes como los reactores modulares pequeños (SMR).
En defensa, Canadá y Polonia acordaron estrechar la colaboración industrial, con un enfoque en tecnologías avanzadas como radares, inteligencia artificial, sistemas de vigilancia y drones de uso dual. La cooperación incluirá también el desarrollo conjunto de capacidades y la participación en grandes ferias industriales, como CANSEC en Ottawa y la MSPO en Kielce, donde Canadá será el país invitado principal en 2026.
La aviación no se quedó atrás. Tras la reciente compra de 40 aviones Airbus A220 por parte de LOT Polish Airlines —fabricados en Mirabel, Quebec—, ambos países buscarán nuevas asociaciones en manufactura avanzada, entrenamiento de pilotos y sistemas de simulación. Además, cooperarán para mejorar la seguridad aérea global a través de la Iniciativa Cielos Más Seguros.
Compromiso firme con Ucrania y la seguridad euroatlántica
La defensa de Ucrania frente a la invasión rusa fue uno de los temas más destacados. Polonia y Canadá reiteraron su apoyo incondicional a Kyiv, incluyendo la formación de sus fuerzas de seguridad a través de la OTAN, el fortalecimiento de la presión económica sobre Rusia y la cooperación en la reparación y mantenimiento de tanques Leopard en Polonia.
Ambos gobiernos acordaron además reforzar la ciberseguridad, combatir la desinformación extranjera y compartir inteligencia en tiempo real. Se fortalecerá la interoperabilidad militar mediante programas conjuntos de entrenamiento y adquisiciones comunes dentro del marco de la OTAN y la UE.
Una alianza más allá de la geopolítica
Más allá de la seguridad, esta asociación estratégica también busca dar forma a un futuro resiliente e inclusivo. Canadá y Polonia acordaron intensificar el diálogo sobre migración, combatir el crimen transnacional, y proteger infraestructuras críticas de amenazas híbridas, como el espionaje o los ataques cibernéticos.
Asimismo, se anunció la creación de un Grupo de Dirección de Alto Nivel para supervisar la implementación de esta alianza y garantizar resultados concretos año tras año.
Una señal clara al mundo
En un momento en que las democracias enfrentan desafíos internos y externos, el mensaje de Varsovia es inequívoco: el multilateralismo, la cooperación y los valores compartidos son el camino hacia un futuro más seguro y próspero.
Como concluyó el Primer Ministro Tusk: “Polonia y Canadá no solo comparten una historia común; hoy, escribimos juntos el próximo capítulo de nuestra alianza estratégica”.
Crédito fotográfico: PAP | PAP/Paweł Supernak