
THE LATIN VOX (27 de agosto del 2025).- Por Daniela Medina.
El incendio forestal conocido en Long Lake, ubicado a aproximadamente 125 km al noroeste de Halifax, ha evolucionado como uno de los más devastadores de la región. Actualmente abarca más de 8,278 hectáreas (equivalente a 82 km²), y sigue sin control mientras las condiciones atmosféricas se tornan cada vez más adversas.
Avance del fuego y factores climáticos
- El incendio se expandió rápidamente durante el pasado fin de semana, impulsado por vientos vinculados al huracán Erin, lo que resultó en daños directos a varias viviendas en el área de West Dalhousie y una evacuación de aproximadamente 330 hogares.
- La débil lluvia registrada recientemente brindó un breve respiro, pero la humedad se ha disipado rápidamente, lo que eleva el riesgo de que el incendio recobre intensidad.
- Autoridades forestales anticipan un empeoramiento del comportamiento del incendio en los días venideros, dada la persistencia del calor, viento seco y condiciones inestables.
Recursos desplegados y labores de contención
- La respuesta incluye más de 150 bomberos, miembros de Ontario y voluntarios locales, junto a una flota aérea compuesta por seis aviones y seis helicópteros, además de maquinaria pesada para trazar líneas de contención.
- Nuevo personal y recursos siguen llegando desde otras provincias para relevar a los equipos agotados. Los centros de comando operativo se han desplazado para facilitar la coordinación y respuesta sobre el terreno.
Evacuaciones, viviendas amenazadas y apoyo a damnificados
- Se mantiene la orden de evacuación obligatoria para alrededor de 350 hogares en la zona de West Dalhousie, con planes de expansión si el fuego continúa acercándose.
- El gobierno provincial ha anunciado apoyo económico inmediato para los evacuados, otorgando entre $500 y $1,000 CAD por adulto y un monto adicional por dependiente, como alivio temporal mientras dure la emergencia.
La temporada de incendios: un fenómeno nacional alarmante
- El incendio de Long Lake representa solo una parte del escenario nacional: 2025 ya se perfila como la segunda peor temporada de incendios en Canadá, con más de 7,5 millones de hectáreas consumidas por el fuego, superando el promedio de la última década.
- Este año se observa un shift geográfico: regiones históricamente poco afectadas por incendios, como las praderas y el Atlántico especialmente Nueva Escocia están ahora en el frente del fuego, lo que refleja una nueva realidad climática.
Conclusión
La batalla contra el incendio de Long Lake ejemplifica un desafío creciente en Canadá: el territorio se está calentando y secando, haciendo que los incendios forestales ocurran en lugares antes considerados fuera de riesgo. El esfuerzo conjunto de bomberos, gobiernos provinciales y federales y voluntarios será crucial para contener el avance, minimizar daños y redefinir políticas de prevención en un contexto de cambio climático cada vez más agudo.
Fuente: Global News
Foto: Global News