
THE LATIN VOX (18 de octubre del 2025).- Por Daniela Medina.
Las autoridades sanitarias canadienses han emitido una alerta nacional ante un brote de Salmonella que ha sido vinculado a alimentos y golosinas para perros, situación que afecta al menos a 31 personas en múltiples provincias y territorios, con siete hospitalizaciones confirmadas, aunque sin fallecimientos hasta el momento.
El brote fue declarado por la Agencia de Salud Pública de Canadá (PHAC) mediante un aviso público fechado el 16 de octubre de 2025, y se encuentra bajo investigación activa. Aun cuando los casos confirmados suman 31, las autoridades advierten que el número real de personas afectadas podría ser mucho mayor.
¿Qué se sabe hasta ahora?
Distribución geográfica y datos epidemiológicos
- De los 31 casos confirmados: 14 se registraron en Alberta, 14 en Columbia Británica, 2 en Ontario y 1 en los Territorios del Noroeste.
- La mayoría de los afectados (58 %) son mujeres. El rango de edad abarca desde recién nacidos hasta personas de 87 años.
- El periodo en que las personas enfermaron va, según la investigación, desde mediados de febrero hasta fines de septiembre de 2025.
- Siete de los casos confirmados han requerido hospitalización. No se han reportado muertes hasta la fecha.
Causa probable: alimentos y golosinas para perros
La PHAC identifica que algunos alimentos y golosinas para perros de las marcas Puppy Love y Puppy World podrían estar implicados. Salmonella fue detectada en muestras de los siguientes productos:
- Puppy World Lamb Lung treats – en bolsas de 150 g, 340 g y 454 g.
- Puppy Love Chicken Wing Tip treats – bolsas de 120 g.
- Puppy Love Chicken Breast treats – bolsas de 120 g y 300 g.
- Puppy Love Beef Chew 6 inch treats – paquete valor con cuatro piezas.
- Puppy Love “Twisty Jr.” beef treats – paquete valor con cinco piezas.
No se ha identificado una única fuente común de suministro para todo el brote, lo que complica la localización precisa del problema.
Regulación y vulnerabilidad del alimento para mascotas
La PHAC advierte que los alimentos para mascotas no están sujetos al mismo nivel de regulación y pruebas que los alimentos destinados a humanos, lo cual puede incrementar riesgos de contaminación.
¿Por qué esto es importante?
Aunque este brote involucra alimentos para perros, sus efectos alcanzan a humanos a través de contacto indirecto: manipulación de alimentos o golosinas para perros, manipulación de recipientes, contacto con perros que puedan portar la bacteria sin síntomas, y superficies contaminadas. La PHAC lo explica así: “Puede enfermarse una persona por contacto con un perro, su alimento o sus golosinas, aún si el perro no presenta signos de enfermedad”.
Esto implica que la seguridad alimentaria se extiende también al ámbito de los productos para mascotas, algo que muchas personas no consideran al manipular estos artículos en casa.
Síntomas, riesgo y recomendaciones sanitarias
Síntomas
Las personas expuestas pueden desarrollar salmonelosis, cuya manifestación incluye: escalofríos, fiebre, náuseas, diarrea, vómitos, calambres estomacales y dolor de cabeza súbito. Los síntomas suelen aparecer entre 6 y 72 horas tras la exposición.
La mayoría de los casos se resuelven en 4 a 7 días, pero en personas vulnerables puede haber complicaciones graves, hospitalización o efectos prolongados.
Grupos de mayor riesgo
Los adultos mayores, los niños pequeños, mujeres embarazadas y personas con sistemas inmunitarios debilitados tienen un mayor riesgo de enfermedad grave.
Recomendaciones para prevenir contagios
La PHAC recomienda varias medidas para reducir el riesgo al manipular alimentos, golosinas o el entorno de perros:
- Lavarse las manos exhaustivamente con agua y jabón inmediatamente después de manipular alimentos o golosinas para perros, o tras tocar al perro o sus desechos.
- Enseñar a los niños a lavarse las manos tras tocar perros o golosinas para mascotas.
- Lavar y sanitizar contenedores, utensilios, superficies y recipientes que hayan estado en contacto con estos productos.
- Utilizar platos y utensilios exclusivos para el perro, lavados por separado de los utensilios humanos.
- Almacenar los alimentos y golosinas para perros lejos de los alimentos destinados a humanos, en un lugar seguro y fuera del alcance de niños.
- Seguir las instrucciones del empaque del producto: fechas de vencimiento, condiciones de almacenamiento (congelar o refrigerar si corresponde), ingredientes, tipo de tratamiento del alimento (seco, deshidratado, congelado, etc.).
- Ante síntomas compatibles con salmonelosis, acudir a un profesional de salud.
Impactos y consideraciones clave
Sobrediagnóstico y casos no informados
Las autoridades estiman que por cada caso confirmado de salmonelosis puede existir hasta 26 casos no reportados, lo cual significa que la magnitud del brote podría ser mucho mayor.
Falta de retiro (recall) masivo
Aunque se han identificado productos implicados, no se ha emitido un retiro masivo obligatorio de los productos por el momento. Esto deja en riesgo a consumidores que aún puedan tener estos artículos en sus hogares.
Efecto en la industria de alimentos para mascotas
Este brote pone en evidencia los posibles vacíos de regulación, supervisión y trazabilidad en la cadena de producción de alimentos para mascotas. Puede generar que las empresas del sector enfrenten nuevas normas, revisiones de seguridad o pérdidas de confianza del consumidor.
Cadena de contaminación indirecta
El hecho de que un producto destinado a animales pueda provocar enfermedad humana también subraya la interconexión entre salud humana, salud animal y medio ambiente —una visión alineada con el enfoque “Una Sola Salud”.
Escenarios futuros y recomendaciones para los responsables
- Emisión de un retiro de producto (recall) o ampliación del aviso
Si se identifican lotes específicos o fuentes comunes, podría generarse un retiro oficial que permita eliminar los productos del mercado y advertir a los consumidores de manera más contundente. - Investigación ampliada y trazabilidad
Dado que aún no se ha identificado un único proveedor común, la investigación podría revelar nuevos productos contaminados, empresas involucradas o fallas en la cadena de producción. Esto podría conducir a estándares más rigurosos o cambios regulatorios. - Mejora regulatoria del sector de alimentos para mascotas
Las autoridades podrían considerar equiparar algunos requisitos de los alimentos para mascotas con los aplicados a alimentos para humanos: controles microbianos más frecuentes, trazabilidad, requisitos de almacenamiento, y etiquetado más claro. - Mayor conciencia pública y educación al consumidor
Este evento puede inducir campañas de sensibilización para dueños de mascotas sobre el manejo seguro de alimentos y golosinas, así como la importancia de la higiene en el entorno del animal.
Lecciones globales y perspectiva internacional
Aunque el brote ocurre en Canadá, sus implicaciones son globales. En un mercado mundializado de alimentos para mascotas, productos que se fabrican o importan pueden cruzar fronteras, por lo que eventos como este deben servir como alerta para otros países.
Además, destaca que la seguridad alimentaria ya no se limita al consumo humano directo: el vínculo humano-animal introduce nuevas rutas de contagio y responsabilidad regulatoria.
Para otros países latinoamericanos o europeos, este caso puede servir como advertencia y motivar la revisión de la normativa sobre alimentos para mascotas, su trazabilidad, producción, almacenamiento y la educación pública en higiene doméstica.
El brote de Salmonella vinculado a alimentos y golosinas para perros en Canadá representa un problema de salud pública emergente que trasciende la etiqueta de producto “para mascotas”. Al afectar a humanos, exigiendo hospitalización en algunos casos, y aún sin un recall oficial, este evento revela fallas en la regulación, la supervisión y la conciencia pública sobre riesgos alimentarios indirectos.
Los propietarios de mascotas, los fabricantes de alimentos de animales, los reguladores y los sistemas de salud pública enfrentan ahora un llamado a la acción: garantizar que la producción de alimentos para mascotas sea segura, que los consumidores manejen estos productos con igual cuidado que los alimentos humanos, y que se establezcan mecanismos de respuesta rápida ante brotes.
La frase “tu perro come esto” ya no puede considerarse ajena a “tu seguridad alimentaria”. En un mundo de vínculos cada vez más estrechos entre humanos y animales, la higiene, la responsabilidad y la regulación se vuelven tan importantes para el bol de comida de tu mascota como lo son para tu propio plato.
Fuente: www.ctvnews.ca
Foto: Google fotos