
THE LATIN VOX (28 de octubre del 2025).- Por Daniela Medina.
El domingo 20 de octubre de 2025, los habitantes de Calgary eligieron a Jeromy Farkas como su nuevo alcalde, tras una contienda electoral muy reñida que ahora ha sido confirmada por un recuento oficial. Farkas derrotó a la concejal Sonya Sharp y a la entonces alcaldesa incumbente, Jyoti Gondek, convirtiéndose en el 38.º alcalde de la ciudad.
Su victoria marca un cambio significativo en el liderazgo de Calgary, con implicaciones políticas, económicas y urbanas que merecen un análisis minucioso.
Perfil del nuevo alcalde
Jeromy Farkas nació en Calgary en 1986 y, antes de asumir la alcaldía, fue concejal de la ciudad representando el distrito Ward 11 entre 2017 y 2021. Se describe a sí mismo como socialmente liberal y fiscalmente conservador, y ha abogado por una serie de políticas de recorte de impuestos, reducción de burocracia y mayor eficiencia del gobierno municipal.
Su ascenso al poder no fue directo: en 2021 compitió sin éxito por la alcaldía y quedó en segundo lugar. Ahora, en 2025, se presentó nuevamente como independiente y obtuvo el triunfo.
La elección: resultados, contexto y factores clave
- La elección celebrada el 20 de octubre tuvo una participación relativamente baja, y Farkas logró la victoria con un estrecho margen. Según datos preliminares, su porcentaje de votos fue cercano al 46,8 % frente a la cifra de su competidora Sonya Sharp que obtuvo alrededor del 25,6 %.
- El recuento oficial validó estos resultados, descartando irregularidades significativas. Elections Calgary confirmó que Farkas es el vencedor confirmado.
- Factores que jugaron a su favor:
- Insatisfacción de parte del electorado con la gestión municipal previa, especialmente en temas como vivienda, costos de vida y desarrollo urbano.
- Su mensaje de “eficiencia municipal” resonó con electores interesados en una administración más austera y orientada al ciudadano.
- El hecho de presentarse como candidato independiente también le dio margen frente a los partidos tradicionales municipales.
Prioridades y promesas centrales de su mandato
Durante la campaña, Farkas detalló varios objetivos clave que ahora tendrá que convertir en acciones concretas:
- Congelar o reducir la tasa de impuestos municipales para aliviar la carga sobre los propietarios de viviendas y pequeñas empresas.
- Mejorar la eficiencia de servicios municipales, como la recolección de nieve, mantenimiento de calles y transparencia en la administración local.
- Impulsar el desarrollo económico, atraer inversiones y reducir barreras para nuevos negocios en Calgary.
- Aumentar la rendición de cuentas del gobierno local, con menos decisiones tomadas tras puertas cerradas y mayor participación ciudadana.
- Atender la vivienda asequible y el crecimiento urbano de una ciudad que ha vivido una expansión rápida, con preocupaciones sobre el costo de vida, el transporte y la infraestructura.
Desafíos inmediatos que enfrenta Farkas
Aunque la victoria es un paso importante, Farkas entra al cargo con varios retos considerables:
- Ciudad en crecimiento pero con tensiones: Calgary, como muchas ciudades canadienses, enfrenta la combinación de crecimiento poblacional, presión sobre viviendas asequibles, tráfico pesado y expectativas crecientes de calidad de vida.
- Gestión de expectativas altas: Sus promesas de reducir impuestos y mejorar servicios podrían chocar con la realidad financiera del municipio, donde los recursos son limitados y las demandas múltiples.
- Balance político: Aunque ganó como independiente, necesitará trabajar con el consejo municipal y con múltiples intereses (residentes, negocios, comunidades) para cumplir sus objetivos sin generarle oposiciones fuertes.
- Economía local y global: Calgary depende en buena medida del sector energético (petróleo y gas) y su diversificación será clave para su futuro: los vaivenes del mercado mundial pueden afectar las finanzas municipales.
- Sostenibilidad y medio ambiente: La ciudad debe integrar también políticas de cambio climático, transporte sostenible y planificación urbana consciente, áreas que tradicionalmente han sido foco de debate local.
Implicaciones para Calgary, Alberta y Canadá
- Para Calgary: Su elección puede marcar un cambio de tendencia hacia un gobierno más centrado en la eficiencia y menos en la expansión ambiciosa, lo que podría redefinir el perfil de la ciudad en los próximos 4 años.
- Para la provincia de Alberta: Calgary es la ciudad más grande de la provincia y su alcalde tiene relevancia no solo local sino también provincial. Su relación con el gobierno de Alberta (provincial) y Ottawa (federal) será clave para temas de financiamiento, transporte e infraestructura.
- Para Canadá: En un momento donde muchas ciudades enfrentan cuestionamientos sobre vivienda, servicios y gobernabilidad urbana, el liderazgo de Calgary bajo Farkas podría ser observado como ejemplo de administración municipal en tiempos cambiantes.
¿Qué próximos pasos se esperan?
- Inauguración oficial del mandato: Farkas tomará posesión del cargo formalmente en los próximos días y presentará su gabinete municipal, equipo de transición y línea de acción inicial.
- Plan de ajustes fiscales: Probablemente durante los primeros meses se anunciará una revisión de la tasa de impuestos municipales, y se definirá un “plan de austeridad” o ajuste presupuestario para liberar fondos hacia servicios clave.
- Diálogo con residentes y negocios: Iniciará consultas públicas sobre vivienda, transporte y desarrollo urbano para aterrizar sus promesas en políticas concretas.
- Negociaciones estratégicas: Farkas necesitará coordinar con los gobiernos provincial y federal sobre financiamiento de infraestructura, vivienda asequible, movilidad urbana y proyectos económicos.
- Seguimiento de promesas clave: Será clave ver cómo aborda los asuntos de vivienda asequible, impuestos y servicios correspondientes al deseo de “mejor ciudad para todos” que planteó en campaña.
La elección de Jeromy Farkas como alcalde de Calgary representa una apuesta por un liderazgo municipal centrado en la eficiencia, el control fiscal y una visión renovada para una ciudad en transformación.
Ahora bien, la victoria es solo el comienzo. Transformar promesas en resultados tangibles —viviendas más asequibles, impuestos más leves, servicios municipales que respondan mejor— exigirá liderazgo, negociación y realismo político. Calgary observa con expectativa si su nuevo alcalde logrará traducir su mandato en una “mejor ciudad para todos”, o si enfrentará las clásicas tensiones entre visión y realidad en la gobernabilidad urbana.
Fuente: globalnews.ca
Foto: Google fotos