THE LATIN VOX (07 de Noviembre del 2025).- Por Daniela Medina.
Un reciente sondeo nacional pone de manifiesto una paradoja política en Canadá: mientras que una mayoría de ciudadanos considera que el gobierno liberal está “fallando” en cumplir sus promesas o expectativas, una parte importante sigue aprobando el desempeño personal de Carney como primer ministro. Este doble patrón crítica al equipo pero respaldo al liderazgo revela las complejas dinámicas que enfrenta Ottawa en esta etapa.
Datos clave de la encuesta y lo que muestran
- El estudio, realizado por una firma demoscópica canadiense, indica que aproximadamente seis de cada diez canadienses aprueban el desempeño general del gobierno liberal bajo Carney.
- Pese a esa aprobación, una mayoría expresa que el gobierno “no está cumpliendo” con lo que prometió o lo que el electorado esperaba, especialmente en áreas como vivienda, costo de vida, infraestructura y economía.
- En cuanto a intención de voto, los liberales mantienen una ventaja moderada sobre el partido conservador.
- La confianza personal en Carney es elevada en varios segmentos: por ejemplo, más del 50 % en ciertos grupos dicen que confían en que él esté a la altura del cargo.
En resumen: el gobierno es evaluado con reservas, pero el primer ministro conserva cierto patrimonio de capital político.
¿Por qué esta aparente contradicción?
Varios factores contribuyen a que los ciudadanos sean críticos con el gobierno pero mantengan apoyos hacia Carney:
1. Crédito individual vs. equipo de gobierno
Carney, ex gobernador del Bank of Canada y del Bank of England, aportó al liberalismo una imagen de tecnócrata, de gestor competente y más moderado, lo que le ha granjeado simpatía personal. Mientras tanto, el equipo liberal sigue cargando con problemas estructurales que se remontan a administraciones anteriores: déficit, inflación, vivienda costosa, expectativas acumuladas.
2. Expectativas elevadas y plazos largos
El nuevo gobierno liberal, con Carney a la cabeza, ha anunciado reformas ambiciosas infraestructura, diversificación comercial, defensa que requieren tiempo para materializarse. Muchos ciudadanos ya perciben que “algo pondrán en marcha”, pero también sienten que el progreso visible es insuficiente por ahora.
3. Contexto externo y turbulencias globales
El escenario internacional guerra comercial con EE.UU., tensiones con China, inflación global genera un ambiente de incertidumbre que puede erosionar la percepción de éxito del gobierno. En ese contexto, Carney aparece como figura que puede manejar crisis, lo que refuerza su aprobación personal.
4. División regional y demográfica
Las encuestas revelan diferencias según edad, región y nivel socioeconómico. Por ejemplo, en zonas atlánticas o entre jóvenes, la aprobación de Carney es mayor; en las praderas o entre quienes sienten más impacto del alza de precios, el escepticismo hacia el gobierno es más fuerte.
Áreas donde el gobierno aparece más “en falta”
El sondeo y los análisis posteriores identifican varias áreas clave donde los ciudadanos sienten que el gobierno liberal está rezagado:
- Costo de la vivienda y asequibilidad: Muchos canadienses consideran que las políticas anunciadas para vivienda asequible aún no se traducen en soluciones concretas en sus comunidades.
- Inflación y costo de vida: Aunque no exclusivo del gobierno actual, existe la sensación de que los esfuerzos para controlar precios, alzas de servicios o impuestos no han sido suficientemente eficaces.
- Infraestructura y transporte: Si bien se han anunciado fondos importantes, los plazos de ejecución son largos y los ciudadanos perciben lentitud en los avances.
- Transición externa – comercio y defensa: Las promesas de diversificar mercados, reforzar la independencia económica o aumentar el gasto en defensa generan reconocimiento, pero también dudas sobre capacidad real, plazos y resultados concretos.
Implicaciones políticas y para la gobernabilidad
- Para Carney: El apoyo personal le da una base sólida para liderar, pero sus márgenes de maniobra pueden depender de que el equipo responda a las expectativas. Su estilo moderado y su acceso a sectores profesionales le dan ventaja, pero también le exige entregar resultados.
- Para el Partido Liberal: Tener un líder con buena aprobación es un activo; sin embargo, la divergencia entre la buena imagen del líder y las reservas hacia el equipo plantea el riesgo de una brecha de expectativas que, si no se cierra, puede erosionar el apoyo electoral.
- Para la oposición conservadora: La situación ofrece oportunidades. Si logran capitalizar el descontento con el gobierno sin necesariamente atacar a Carney directamente podrían recuperar terreno.
- Para las elecciones futuras: Si las cifras de aprobación personal se mantienen pero los indicadores de desempeño gubernamental no mejoran, podría generarse un escenario de “voto por Carney, pero no por los liberales”, lo que abre camino a cambios de alianzas, caídas en la popularidad o fragmentación política.
- Para la política pública: La brecha entre aprobación de persona y evaluación del equipo sugiere que las políticas deben entregarse con mayor visibilidad, plazos más cortos, comunicación efectiva y mecanismos de rendición de cuentas reforzados.
Escenarios probables a mediano plazo (12-18 meses)
- Refuerzo del liderazgo y entrega visible
- Si el gobierno logra concretar algunos proyectos emblemáticos (infraestructura, vivienda, comercio exterior) y Carney mantiene su aprobación, los liberales podrían ampliar su ventaja electoral.
- La mejora en desempeño gubernamental podría reducir la disparidad entre aprobación del líder y del equipo.
- Estancamiento y erosión de confianza
- Si los resultados demoran, los ciudadanos podrían cuestionar tanto al gobierno como al líder. La brecha aprobaciones/evaluaciones negativas podría ampliarse, debilitando la posición liberal.
- La oposición podría capitalizar esa doble debilidad para recuperar apoyo.
- Crisis de mandato o reajuste interno
- En el caso de un evento externo mayor (crisis económica, escándalo, fracaso en política exterior) que desplace la atención y genere una caída drástica en la aprobación del gobierno, Carney podría enfrentar desafíos internos o una renegociación de prioridades.
- Podría también desencadenarse una reorganización del equipo liberal o cambios de gabinete importantes.
La encuesta revela que en Canadá no todo está en crisis para el gobierno liberal, pero sí enfrenta una tensión importante: la buena imagen del líder no se traduce automáticamente en evaluaciones positivas del desempeño global del equipo de gobierno. Para Carney, esa es una oportunidad y un desafío al mismo tiempo.
El tiempo, los resultados concretos y la percepción ciudadana marcarán si esta etapa se convierte en un renacimiento liberal o en una oportunidad desaprovechada. En un entorno político volátil, donde la economía, la vivienda y la relación con EE.UU. marcan el ánimo colectivo, el margen de maniobra existe… pero exige entrega. El reloj ha empezado a correr.
Fuente: nationalpost.com
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