THE LATIN VOX (08 de Diciembre de 2025).- Por Daniela Medina.
En un giro significativo de sus políticas migratorias, el gobierno de Immigration, Refugees and Citizenship Canada (IRCC) anunció el 8 de diciembre de 2025 que implementará una nueva categoría especial dentro de su sistema de “Express Entry” destinada exclusivamente a médicos extranjeros que ya trabajan en el país con visa temporal.
La medida, presentada por la ministra Lena Metlege Diab, busca impulsar la integración de estos profesionales al sistema de salud canadiense, en un contexto de déficit de personal sanitario, largas listas de espera y desigual distribución de médicos en las distintas provincias.
Este anuncio representa uno de los cambios migratorios más ambiciosos en años recientes para el sector salud: no solo crea un puente acelerado hacia la residencia permanente, sino que reserva 5 000 cupos federales adicionales y distintos a los ya existentes para que provincias y territorios nominen profesionales con ofertas laborales.
¿Quiénes son elegibles y cómo funcionará la nueva vía?
Según los criterios dados a conocer:
- La categoría está dirigida a doctores que trabajan en Canadá con permiso temporal y que hayan acumulado al menos un año de experiencia laboral canadiense en los últimos tres años.
- Las invitaciones para solicitar la residencia permanente bajo este mecanismo comenzarán a emitirse a inicios de 2026.
- Las 5 000 plazas adicionales están disponibles para médicos licenciados que cuenten con una oferta de empleo de una provincia o territorio, y quienes sean nominados gozarán de un permiso de trabajo que podrá procesarse en apenas 14 días, lo que les permitirá continuar ejerciendo mientras se completa su trámite migratorio.
En palabras de la ministra Diab, la medida “ayudará a mantener médicos listos para ejercer, de modo que las personas en todo Canadá puedan recibir la atención que necesitan”.
¿Por qué ahora? Una respuesta estructural a la crisis sanitaria
El anuncio llega en el marco de un compromiso del presupuesto nacional de 2025 para “llenar vacíos críticos de mano de obra calificada” en sectores estratégicos, entre ellos la salud.
Canadá enfrenta desde hace años una escasez crónica de médicos, especialmente fuera de las grandes áreas metropolitanas, lo que limita el acceso a atención médica, alarga las listas de espera, y pone en riesgo la calidad del servicio. Con esta iniciativa, el gobierno pretende no solo atraer talento internacional, sino retener a quienes ya trabajan en su sistema: una forma de estabilizar el recurso humano esencial.
Además y aunque Canadá ha reducido en 2025 los ingresos totales de residentes permanentes como parte de su política migratoria general estas 5 000 plazas extra para médicos actúan como una excepción clara a la parquedad, evidenciando que el gobierno está dispuesto a priorizar ciertos perfiles esenciales.
Reacciones: esperanza y desafíos pendientes
El anuncio ha generado expectación tanto en profesionales extranjeros como en las autoridades sanitarias de varias provincias. Para muchos médicos que trabajan actualmente con visas temporales, esta es una puerta esperada hacia la estabilidad, dignidad laboral y posiblemente una carrera a largo plazo en Canadá.
Sin embargo, no todos los desafíos se resuelven con esta medida. La integración de médicos internacionalmente formados sigue dependiendo de la homologación de sus credenciales, exámenes provinciales, procesos de licencia y requisitos regulatorios que varían entre provincias. Por lo tanto, obtener la residencia permanente no implica automáticamente que puedan ejercer sin trabas.
Organismos de salud y asociaciones médicas advierten que tendrá que acompañarse con reformas profundas en infraestructura sanitaria, distribución de recursos, incentivos para zonas rurales y políticas de retención, para que el anuncio no sea solo un parche sino un cambio duradero.
Implicaciones para Canadá y su sistema de salud
Este giro político-migratorio puede representar varias transformaciones de largo plazo:
- Refuerzo del sistema sanitario nacional: la entrada de médicos ya adaptados al contexto canadiense podría reducir las listas de espera, mejorar cobertura médica y aliviar la presión sobre hospitales saturados.
- Mejor distribución territorial de servicios: al permitir que las provincias nominen médicos, se abre la posibilidad de fortalecer la atención primaria en zonas rurales o menos atendidas.
- Atracción de talento global: la medida refuerza la estrategia gubernamental de atraer profesionales calificados, lo cual puede beneficiar no solo al sector salud sino a otros rubros críticos.
- Reequilibrio migratorio selectivo: a pesar de una política general de moderar la inmigración, Canadá demuestra que está dispuesto a flexibilizar sus reglas cuando hay necesidad urgente de talento especializado.
Riesgos, retos e interrogantes
No obstante, esta iniciativa no está exenta de tensiones ni controversias. Entre los posibles puntos críticos:
- Reconocimiento profesional desigual: médicos formados en el extranjero podrían enfrentar largos procesos burocráticos para homologar títulos, aprobar exámenes y obtener licencia para ejercer.
- Desafíos de integración y permanencia: lograr que los médicos permanezcan en zonas con carencias sanitarias a menudo rurales o remotas requerirá incentivos adecuados: vivienda, remuneración, estabilidad.
- Expectativas sociales vs. capacidad operativa: la población podría esperar mejoras inmediatas en la atención médica, pero la solución real demanda recursos, planificación y tiempo.
- Tensión con la política migratoria general: algunos sectores podrían cuestionar la decisión de abrir plazas adicionales en medio de una política más dura hacia migrantes temporales o clases ordinarias.
Con esta medida, Canadá lanza una apuesta audaz: convertir una crisis estructural la escasez de médicos en una oportunidad para reimaginar su sistema de salud, a través de la inmigración selectiva y la retención de talento internacional.
La decisión de priorizar médicos extranjeros ya presentes en el país, otorgándoles un camino claro hacia la residencia permanente, no solo responde a una urgencia sanitaria, sino también a ejercicios de estrategia migratoria orientados a fortalecer sectores clave.
El éxito de esta iniciativa dependerá, sin embargo, de su implementación: de la coordinación entre autoridades federales, gobiernos provinciales, colegios de médicos y comunidades. Si logra concretarse, podría marcar un cambio estructural en la forma en que Canadá aborda la salud pública, la inmigración y la integración de profesionales internacionales.
Fuente: www.cbc.ca
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