En un movimiento que promete transformar la banca en Canadá, se avecinan cambios importantes que otorgarán a los consumidores y empresas canadienses un control significativamente mayor sobre sus datos financieros. Este cambio se conoce como open banking (banca abierta), y aunque su implementación será gradual, su impacto podría ser revolucionario.
¿Qué es el Open Banking? El open banking permite a los consumidores compartir sus datos bancarios con otras empresas. La aplicación más común es la conexión con aplicaciones de presupuesto o gestión financiera, que permiten a los clientes consolidar diferentes cuentas bancarias y tarjetas de crédito en un solo lugar. Además, se están desarrollando otros usos, como pagos más sencillos, contabilidad automatizada y gestión financiera empresarial.
Uno de los aspectos más destacados es la evaluación crediticia. Bajo el open banking, los prestamistas pueden acceder directamente a los datos bancarios de un individuo, lo que les permite ir más allá de las puntuaciones de crédito tradicionales. Los consumidores también pueden utilizar esta herramienta para construir sus propias puntuaciones de crédito, demostrando, por ejemplo, pagos de alquiler confiables.
Beneficios y Desafíos Los defensores del open banking elogian su capacidad para fomentar la competencia, cambiar drásticamente la forma en que se realizan los pagos y crear un sistema financiero más centrado en las personas. Sin embargo, su adopción podría ser lenta, ya que requiere una infraestructura sólida y la confianza de los consumidores.
El Futuro de la Banca en Canadá El gobierno federal ha prometido una legislación marco para implementar el open banking en Canadá, después de años de posponer la posibilidad. A medida que se desarrolle este cambio, los canadienses podrán tomar decisiones financieras más informadas y acceder a servicios más personalizados.
En resumen, el open banking representa una revolución silenciosa en la banca canadiense, con el potencial de democratizar los datos financieros y mejorar la inclusión financiera. Aunque su adopción será gradual, su impacto podría ser duradero y transformado.